Además, los autores del estudio destacan que los ataques están cambiando sus objetivos, que cada vez se centran más en equipos de particulares frente a las grandes redes de empresas. El empleo de códigos maliciosos para capturar información confidencial representó el 74% de las principales 50 muestras registradas, lo que supone un aumento del 54% desde el semestre anterior.
España, Gran Bretaña y Estados Unidos
Los autores del informe señalaron que España es el tercer país por orden de emisores de ataques de ‘phishing’, sólo por detrás de Gran Bretaña (44% de los casos) y Estados Unidos (un 12%).
Los expertos en seguridad informática, además, alertaron de que, a medida que aumenten las recompensas económicas, “es muy probable que los atacantes desarrollen códigos malintencionados más sofisticados e indetectables para utilizarlos en redes bot, con capacidad para desactivar antivirus, ‘firewalls‘ y otras medidas de seguridad”, explicaron.
La tendencia confirma que “los atacantes están abandonando los ataques grandes y con diferentes objetivos dirigidos a perímetros de redes empresariales para centrarse en ataques más específicos en aplicaciones Web y equipos cliente“, concluyó.